El mundo sigue en pié

27.12.2012 12:32

 

por Sarahi Fuster
 
    Este año todos fuimos apabullados por la noticia un tanto aterrorizante sobre la fecha exacta del fin del mundo, todo era tan preciso y medido que daba un poco de pánico no creer que así sería. Muchos de nosotros nos manteníamos escépticos ante tal desastre casi en puerta, pero cuando sucedían desastres de la talla del terremoto de Guatemala o el huracán monstruoso de Nueva York los huesos se nos estremecían al pensar que en cualquier momento podíamos ser los siguientes.
 
    Al día de hoy, sabemos que el tan hablado 21 de diciembre ha pasado y que seguimos aquí en la tierra vivos y coleando como vulgarmente se dice. No se me vayan todavía, aún no he terminado mi artículo de hoy, porque les quiero mencionar un breve resumen de algunas de las creencias sobre el "día final" (esa frase hollywoodense es apantallante, me encanta).
 
    Empecemos con uno de los finales de la humanidad que es muy poco conocido y que además aún no estaría por suceder. Newton, sí Newton, leyeron bien, predijo según sus cálculos y basándose en el libro de Daniel de la biblia, que el famoso apocalípsis sería en el año 2060, así que aún falta mucho según Newton para que todo esto acabe. 
 
 
    Por otro lado, el famoso Nostradamus, y no podía faltar con su lógica y muy, muy general forma de predecir acontecimientos, algo así como las predicciones de los horóscopos (sin ofender a quienes crean en él), escribió que vendría un rey del terror seguido de una gran guerra, por supuesto, después de la gran guerra mucha paz y felicidad (muy común en estas percepciones apocalípticas).
 
    Me costó un poco creerlo pero sí, los nórdicos también tienen un  fin del mundo. Los dioses nórdicos un día harán una batalla, la cual será en vano porque el mal reinará y sólo sobrevivirán seres divinos y humanos. Bueno, al menos ellos le dieron otro enfoque más creativo, aunque muy pesimista.
 
    Cómo no mencionar al fin del mundo Maya, un rayo atravesaría el centro del universo el 22 de diciembre del 2012 generando una nueva raza de seres humanos más avanzados. Si hubiera sido así, quizá no hubiera estado tan mal, al menos yo estaría escribiendo un artículo sobre una nueva invención que podría cambiar la existencia del ser humano.
 
    Encendamos una velas, unos inciensos para mencionar la siguiente percepción. Los budistas no creen en el fin del mundo, de hecho ellos creen que el ser humano cambia de comportamiento cada que un año finaliza. Ellos sólo creyeron que después del 2012 los hombres serían seres más iluminados y espirituales.
 
    Para finalizar con este recuento les tengo el final más dramático y fatal, el apocalípsis del catolicismo, aunque hay que decir que el Papa Benedicto XVI declaró que el mundo no tendría porqué acabar precisamente el 21 de diciembre.
 
    En conclusión mis queridos lectores es que, como lo dije en uno de mis artículos del año pasado, sigamos trabajando y luchando duro por el día de hoy, nunca por el pasado, ni por el mañana, ni porque nosotros mismos nos inventemos fechas para que el mundo acabe, como reloj de alarma para que despertemos y hagamos algo por cambiar nuestra situación hoy.
 
Les deseo un buen inicio de año y sobretodo mucha fuerza, alegría y armonía para vivir este segundo, justo este segundito.